Decálogo del Alumn@ Filadelfia


Niño sosteniendo libros en un campo verde
Un buen lector es un buen alumno

¿Existe el alumno perfecto? ¿Es posible describirlo?

Hace un par de semanas compartimos en este espacio nuestra visión del «maestro ideal» con el Decálogo del Maestro Filadelfia. Si bien los educadores nos debemos a nuestros alumnos, existen algunas características deseables en ellos que nos ayudan a ser más eficientes y a disfrutar más de nuestro trabajo. Sin que ello implique que sólo seremos buenos maestros cuando tengamos buenos alumnos: quizá el buen maestro se perfecciona ante los retos y las dificultades. Hemos incluido aquí en diez frases cortas lo que consideramos describe al alumno ideal. Lo hemos llamado el Decálogo del Alumn@ Filadelfia porque estos son los ideales hacia los que intentamos orientar a nuestros niño y jóvenes en nuestros colegios Valle de Filadelfia, pero creemos que es igualmente válido a través de las instituciones e incluso los países, idiomas y metodologías.

Decálogo del Alumno Filadelfia

  1. Disfruta aprender: lo ve como un privilegio.
  2. Toma responsabilidad en la construcción de su conocimiento: es un agente activo de su propio proceso de aprendizaje.
  3. Lee, indaga, cuestiona, experimenta, busca, debate; con honestidad, responsabilidad y respeto hacia las diferencias.
  4. Es respetuoso, agradecido  y amable con las personas en su entorno: compañeros, padres y maestros. Con su ejemplo, demuestra que valora el esfuerzo y tiempo que éstos le dedican.
  5. Respeta la vida. Asume su responsabilidad con el medio ambiente, es agente de cambio hacia la conservación de nuestro planeta.
  6. Se compromete con su propio desarrollo y el de los demás: cumple con sus obligaciones, realiza su trabajo con calidad y entusiasmo.
  7. Es generoso con su tiempo. Siempre que es posible, ayuda a otros. Usa sus conocimientos y habilidades en beneficio de todos.
  8. Siente orgullo por su patria, su familia y su escuela, y es digno representante de éstos en cualquier ámbito.
  9. Disfruta de la algarabía de ser joven, pero con responsabilidad. Sabe divertirse sin hacerse daño y sin afectar a otros. Es cuidadoso de su salud física, mental y espiritual.
  10. Conoce su propio potencial, tiene alta autoestima y altas expectativas de sí mismo.

¿Crees que nos haya faltado alguna característica que no pueda englobarse en las aquí incluidas? ¿Crees que algo sale sobrando o no es tan importante? ¿Cómo sería el alumno ideal? ¡Ayúdanos a describirlo, deja tus comentarios!

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Crédito FOTO: bowie15 / 123RF Stock Photo

(R) 2007 Elisa Guerra Cruz

 

3 comentarios

    1. Gracias por tu comentario, Diana! Si, completamente de acuerdo, el respeto es importante. Está en el punto 4, pero junto con el agradecimiento y amabilidad. Quizá haría falta destacarlo un poco más? Muchos saludos!

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